Conmemoración (no celebración) del Día Internacional de la Mujer

Conmemoración (no celebración) del Día Internacional de la Mujer

Este 8 de marzo se conmemora el día internacional de la mujer,

pero no nos equivoquemos, no se trata de una celebración, sino, por el

contrario, pues en esta fecha se trae a colación el amargo recuerdo de

aquel 8 de marzo de 1908, en donde fallecieron 129 mujeres calcinadas

en el incendio de la fábrica Cotton, de Nueva York, Estados Unidos,

luego de que ellas se declararan en huelga, bajo el reclamo legítimo de

la reducción de jornada laboral a 10 horas y un salario igual al que

percibían los hombres. El dueño de la fábrica ordenó cerrar las puertas

del edificio para que las mujeres desistieran y abandonaran el lugar, no

obstante, el resultado fue la muerte de las obreras que se encontraban

en el interior de la fábrica cuando esta empezó a incendiarse.

La noción de ”conmemoración” hace referencia al acto y el

resultado de conmemorar: celebrar un aniversario, recordar a alguien o

algo de manera solemne, en tanto que la de “celebración”, es un

término que se refiere a la acción de celebrar o festejar algo.

Este hecho histórico dio inicio a la transformación económica y al

modo de trabajo en el mundo, sin embargo la lucha por la igualdad para

la mujer estaba lejos de concluir.

En 1910, en el marco de la Conferencia Internacional de Mujeres

Socialistas celebrada en Copenhague, Dinamarca, el tema central fue el

sufragio universal para todas las mujeres, y por moción de Clara Zetkin,

líder del levantamiento de las 20.000, se proclamó oficialmente el 8 de

marzo como el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, en homenaje

a las mujeres caídas en la huelga de 1908.

En 1911, como consecuencia de la decisión adoptada en

Copenhague el año anterior, el Día Internacional de la Mujer se

conmemoró por primera vez (el 19 de marzo) en Alemania, Austria,

Dinamarca y Suiza, con concentraciones a las que asistieron más de 1

millón de mujeres y hombres. Además del derecho de voto y de ocupar

cargos públicos, exigieron el derecho al trabajo, a la formación

profesional y a la no discriminación laboral.

En los años de 1913 a 1914, en el marco de los movimientos en

pro de la paz que surgieron en vísperas de la primera guerra mundial,

las mujeres rusas celebraron su primer Día Internacional de la Mujer, el

último domingo de febrero de 1913.

En el resto de Europa, las mujeres realizaron reuniones en torno al

8 de marzo del año siguiente para protestar por la guerra y para

solidarizarse con las demás mujeres.

En 1917, como reacción ante los 2 millones de soldados rusos

muertos en la guerra, las mujeres rusas escogieron de nuevo el último

domingo de febrero para declararse en huelga en demanda de “pan y

paz”, cuatro días después, el Zar se vio obligado a abdicar y el gobierno

provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. Ese histórico

domingo fue el 23 de febrero, según el calendario juliano utilizado

entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el calendario gregoriano

utilizado en otros países.

En 1975, las Naciones Unidas celebraron el Día Internacional de la

Mujer, por primera vez, el 8 de marzo, pero fue hasta 1977, en su

Asamblea General cuando se designó oficialmente esa fecha.

Aún hoy en la actualidad, en pleno siglo XXI, en la plenitud y auge

de los derechos humanos, se siguen presentando situaciones de

discriminación hacia la mujer, tanto en el ámbito laboral como social y

cultural.

No obstante que la lectura de los artículos 1º, quinto párrafo y 4º,

primer párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos

Mexicanos, expresa claramente que, el principio de igualdad entre la

mujer y el hombre implica tanto la igualdad ante la ley como el mandato

de no discriminación por razón de género, resultando por tanto,

inaceptable la admisión de argumentos, razones o planteamientos que

atenten contra dichos derechos.

Claramente las recomendaciones generales 28 y 35 del Comité de

las Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la

Mujer (Comité CEDAW), apuntan que el contexto ideológico, social y

cultural en que se desenvuelven las relaciones entre mujeres y hombres

muestran patrones socioculturales que determinan la existencia todavía

de conceptos estereotipados sobre la desigualdad y relaciones

asimétricas de poder entre ambos géneros, lo cual, a la postre,

engendra prácticas de discriminación.

En tales circunstancias, con la finalidad de tutelar los derechos

humanos de igualdad y no discriminación, las autoridades tienen el

deber de desestimar cualquier argumento que se formule con base en

un lenguaje que contenga estereotipos y prejuicios de género, debiendo

rechazar planteamientos de esa naturaleza.

Conmemoremos pues el Día Internacioinal de la Mujer haciendo

votos por la extinción y destierro definitivo de cualquier acto, omisión y

pensamiento discriminatorio, estereotipado y degradante hacia la mujer.

Como siempre un placer saludarlo esperando que estas pocas

letras hayan sido de su agrado y, sobre todo, de utilidad ¡Hasta la

próxima!



NOTAS RELACIONADAS

Por: Fernando A. Mora Guillén / Febrero 24, 2024
Por: Juan Bautista Lizarraga / Febrero 24, 2024
Por: Dra. Nancy Álvarez / Febrero 21, 2024