NO VIOLENCIA CONTRA LA MUJER EN NINGUNA DE SUS FORMAS
Autoridades, instituciones educativas, medios de comunicación y el seno familiar, debemos fomentar el aprender a identificar la violencia de género en sus maneras más atroces, hasta las más sutiles que pueden dar origen a las primeras... como preferir tener hijos varones que niñas, dejar las labores domesticas para las mujeres de la casa, dar reglas diferentes entre los hijos según su sexo, hasta el abuso psicológico, sexual o físico.
Permitir que los medios de comunicación, en especial cine y televisión utilicen a la mujer como objeto sexual o el estereotipo de la venta de productos para el aseo reafirma ideas de supremacía en el varón, y la mujer lo asume cotidiano, ¡hay que abrir la mente!, lo primero es identificarlo, así, el pensamiento ya no será pasivo ante esa muestra.
Las mujeres debemos saber que serlo no nos hace mejores personas, ser MUJER no es en sí un atributo, ambos generosos somos seres humanos que debemos ser plenos, valorados, con mismas oportunidades y respeto, la lucha de la MUJER es modificar esas ideas preconcebidas que han sobrevivido por generaciones de abnegación, debilidad o incapacidad, hasta la violencia sexual, psicológica y económica, con leyes a modo para ponerla en desventaja y sea más duramente juzgada en comparación al hombre, o justificando la agresión hacía ellas.
Hoy en día, en el manejo de masas, se ha apelado a culparnos a nosotros mismos diciendo que el cambio debe venir desde el hogar, cuando una economía ha desecho hogares, haciendo trabajar a ambos padres en condiciones de explotación, hasta desintegrando hogares al tener que emigrar un miembro de la familia a Estados Unidos para mejorar la situación de falta de trabajo o salarios miserables, también la violencia y la impunidad ha generado estados de ánimo que lejos a motivar cultivarnos, aprender más, estudiar, compartir en familia, ha deteriorado la salud mental, en la que la televisión comercial ha tenido plena oportunidad de hacer su parte, por ello, analizar, tener herramientas para comparar y discernir es necesario para lograr la equidad, hay que entenderlo, creerlo y asumirlo, y mucha de esa labor debiera venir de la autoridad, ellos poseen los recursos, oportunidades y hasta la capacitación, así como la representación para lograrlo.
La lucha es para poner en orden lo JUSTO para ambos sexos, en especial en la MUJER quien ha sido agredida históricamente y fomentar una cultura sana y en igualdad, mediante acciones de educación, concientización y legalidad para propiciar ese cambio.
Mujeres, seamos solidarias con otras mujeres, es el camino más corto para llegar a el mismo, porque empezaremos por nosotras mismas, a no querer pagar ese precio de la belleza a costa de la salud, a la maternidad no responsable, al tener hijos con tantos fines, como retener un hombre, que no se pase la edad reproductiva, una sexualidad violentada o sin precauciones, a veces, el más lejano, dar vida a un ser que sea pleno y feliz; también debemos informarnos y defender nuestro valor, aunque hayamos vivido en un hogar en que nos prepararon para no reconocerlo, sino todo lo contrario, cuando ya hay conciencia, cuando se percibe la incomodidad de los resultados que hasta hoy hemos logrado, es momento idóneo y fructífero para realizar cambios, pero insisto, la autoridad sigue en deuda.
Una mujer informada también entenderá que hay mujeres que a lo largo de la historia han generado con valentía cambios, nos han heredado los adelantos evidentes que hoy gozamos, aunque aún limitados, ellas han sentado un precedente, pese a la represión en que a muchas les costó la vida, el encarcelamiento o ser torturadas, ellas son fuente de inspiración, pero hay que estar alertas a aquellas mujeres oportunistas, que aprovechando que hay medios abiertos a promover la equidad de género, se jactan de que son mujeres, y como tales deben de ser apoyadas por ese simple hecho, nuevamente reitero, ser mujeres no es una virtud en si, ser una gran mujer, una mujer de bien, con ideas justas y sanas para si misma y las demás, solidaria y de trabajo en lograr nobles fines para vivir en armonía y plenitud, se han de ver en sus hechos, deben anteponerse firmes a sus palabras.
El listón morado es el símbolo de la NO VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES.
Por esta causa, aquí, en esta fiesta de movimiento para alcanzar esa PAZ, sí se ve bien que todas luzcamos el mismo vestido, la misma estola morada...
Después de hoy, el día elegido para tal conmemoración, utilicemos ese listón morado pero atado en un dedo, para no olvidarlo, NO VIOLENCIA CONTRA LA MUJER EN NINGUNA DE SUS FORMAS.