Una riña muy cara

El presidente está dale y dale con que ahora hay que elegir a través del voto a los jueces, magistrados y ministros, en pocas palabras los que aplican la ley, pero vámonos por partes.

Su justificación es que hay que votarlos para que sean menos corruptos, pero digo, ejemplos sobran de que elegir por medio del voto no es exactamente garantía de que no vayan a cometer actos de corrupción. Además, un factor esencial que deberían de tener todos, pero más quien imparte la justicia como lo son los jueces, magistrados y ministros es la imparcialidad. Si éstos son electos por voto popular, quiere decir que entonces tienen que ser candidatos de un partido político, y creo que está de más explicar que literalmente tomarían partido en sus decisiones.

También hay que ver el fondo del por qué quiere que se elijan por voto popular, y no es exactamente porque tenga el sustento de que sería lo mejor para las personas, sino simplemente porque está enojado porque con tal de aprobar leyes que ni siquiera eran constitucionales hicieron un cochinero y la Corte le echó para atrás esas leyes, es una rabieta. Si la Corte se hubiera quedado callada y no hubiera hecho literalmente para lo que está creada, ni estaría hablando del tema.

Hay muchísimas injusticias en nuestro país, injusticias sociales y sistemáticas con las que las personas nos enfrentamos diariamente, pero hay una gran diferencia entre quienes son víctimas, y quienes se hacen las víctimas. La Corte, le guste a quien le guste, en estos casos ha estado haciendo su chamba, porque la evidencia habla por sí sola, y esa es la importancia del Poder Judicial, que cuando el Poder Legislativo y el Ejecutivo se creen intocables, entra el judicial a recordarles que todos somos iguales.

Además, no se vale utilizar el poder para querer desprestigiar por caprichos personales, mucho menos se vale utilizar el dinero de las personas, porque por medio de las páginas oficiales del gobierno han querido denostar a la Corte y a quien no quiera alinearse, y hacer las infografías, quién mueve la página, quien genera el contenido, el dinero de publicidad pagada si es que lo hacen, todo eso cuesta y es dinero de las personas. Las páginas oficiales están para darnos a conocer los programas, avances, comunicados del gobierno, no para riñas personales.

Y otra, si de verdad son corruptos, ahí está la fiscalía, que como nos encantaría que realmente fuera autónoma y sola trabajara sin deberle ni temerle nada a nadie, pero la realidad es que no, y que el presidente todavía tiene mucha injerencia en ella, así que para empezar, denle su debida autonomía y déjenla trabajar como debe, pero como todavía no lo hacen ni ganas tienen, pues mínimo hagan que persigan los delitos de corrupción que tanto mencionan, porque hay que recordar que a nadie han castigado de los que tanto les gusta decir en sus discursos. Mucho les encanta justificarse en que todos los que no están de acuerdo con ellos o los que estuvieron en el pasado son corruptos, pero a nadie de esos vemos castigado.