"La política de las personas"
La palabra democracia a veces hasta parece que la agarran de moda de tanto que la escuchamos, pero no se trata nada más de escucharla y mencionarla, sino también de ejercerla.
La democracia en pocas y sencillas palabras refiere a un sistema político en donde la toma de decisiones depende de las personas o bien a través de representantes que elegimos a través de elecciones, pero su cimiento no deja de ser las personas.
Hace unos días estuvimos participando en un foro donde analizamos el Índice de Desarrollo Democrático de México, el cual evalúa el comportamiento de la democracia y el desarrollo democrático en cada uno de los 32 estados del país.
Más allá de lo que podamos discutir en datos duros, que específicamente en Baja California no vamos bien, todos llegamos a una misma conclusión, y es que no se puede hablar plenamente de democracia sin la participación de las personas, sin que cada una de nosotras nos involucremos en la toma de decisiones de nuestro entorno, y sobre todo, que dicha participación sea válida y nos sintamos protegidas por nuestras instituciones y leyes.
El estar protegidos por nuestras instituciones puede salir de nuestro control, sin embargo, el que nos involucremos en lo que sucede en nuestro entorno depende completa y únicamente de cada uno de nosotros. La política realizada por la clase política actual no es exactamente un referente que nos anime a participar, todo lo contrario, sus malas acciones lo único que generan es un sentimiento de repudio que nos aleja, pero cuando algo se está haciendo mal, y más si nos afecta tan directamente como lo es la falta de desarrollo de nuestro entorno, lo peor que podemos hacer es darnos la media vuelta y seguirlo dejando sólo en las manos de los mismos que ya han hecho tanto daño.
Lo primero que pensamos cuando escuchamos que tenemos que participar es en el ir a votar, que sin duda es primordial y más en Baja California donde ni siquiera se da el 30% de participación en elecciones, sin embargo el votar es sólo el inicio de una participación que debe de ser constante, de otra manera es dar una hoja firmada en blanco para que sigan haciendo cosas en beneficio particular y no de la comunidad.
Que no se nos olvide que tenemos el derecho de conocer qué se hace con el dinero que todas las personas aportamos, a eso se le llama transparencia y no debemos de tener miedo en exigirla, y podrá sonar complicado pero es mucho más sencillo de lo que muchas veces creemos, basta con preguntar a través de los portales de instituciones como el INAI, los cuales para eso existen y es sólo un muy pequeño ejemplo de lo que podemos hacer por el simple hecho de ser ciudadanas y ciudadanos. Debemos de perder el miedo de utilizar las herramientas que actualmente tenemos para seguir construyendo democracia, de otra manera seguirá ganando la desinformación, se seguirán aprovechando de la necesidad de las personas para mantenerse en el poder, y seguiremos sin avanzar en los temas que más nos importan.
