Buscan poner tope a las rentas en California

SAN DIEGO.- Una propuesta de ley que votará el senado de California próximamente podría finalmente poner freno a la una escalada de precios de alquiler de vivienda que se disparó en la última década.
La iniciativa ya fue aprobada en la cámara baja de California y en un comité del senado y ahora pasa a su última votación, antes de ser enviada al gobernador Gavin Newsom para que la firme y la convierta en ley que entre en vigor el próximo primero de enero.
La propuesta dice que los arrendadores no podrán aumentar la renta en más de 7 por ciento anual más aproximadamente 2.1 por ciento que es el incremento anual en la carestía de vida.
De convertirse en ley, con la clasificación AB184, la iniciativa también por primera vez impedirá que los arrendadores echen de las viviendas a sus inquilinos a menos que haya razones de peso.
Actualmente un arrendador puede aumentar el precio de renta arbitrariamente y si el inquilino está en desacuerdo, expulsarlo para rentar a alguien que pueda pagar más.
El condado de San Diego tiene uno de los promedios de renta más altos en el país y el tercer lugar en el estado de California luego de San Francisco, que tiene la vivienda más cara, y del área de Los Ángeles.
La renta promedio en San Diego para un departamento modesto fue de 2,237 dólares mensuales en el pasado mes de junio. El sitio especializado rentjungle estima que este mes incrementará por o menos otros siete por ciento, para alcanzar los 2,393 dólares mensuales.
Ese precio inalcanzable para muchas familias.
Para dar una idea que usan organizaciones defensoras de inquilinos, una persona que gana el salario mínimo en California con tiempo completo percibe unos dos mil dólares mensuales, pero después del descuento de impuestos se reduce a alrededor de 1,300 dólares al mes.
El salario de dos personas que ganan el mínimo de tiempo completo, que son en total unos 2,600 dólares, es insuficiente si se descuenta la renta de 2,393 dólares y quedan 203 dólares para el resto de los gastos de ambos.
David García, un investigador del tema de la vivienda en la Universidad de California en Berkeley (UCB), calcula que la ley de control de rentas podría beneficiar a lo inmediato a más de cuatro millones y medio de inquilinos.
Dijo que poner límite a los costos de vivienda permitirá a muchos californianos emplear recursos en prioridades como la salud.
Pero las asociaciones de propietarios y de agentes de bienes raíces en California se oponen a la propuesta de ley.