Covid impacta en la proporción de gente insatisfecha.

Covid impacta en la proporción de gente insatisfecha

CIUDAD DE MÉXICO, febrero 27 .- En el periodo de la pandemia de Covid-19 comprendido entre enero de 2020 y el mismo mes de este año, la proporción de población insatisfecha y poco satisfecha en el país aumentó, de acuerdo con los resultados del módulo de Bienestar Autorreportado (BIARE) del Inegi.
El reporte también mostró que disminuyó la proporción de población moderadamente satisfecha y satisfecha. Los datos al mes pasado arrojan que, entre la población adulta urbana, 2.8% se calificó como insatisfecha; en el siguiente rango, 9.5% se evaluó como poco satisfecha; 42.8% se reportó como moderadamente satisfecha; en tanto que 44.9% se encuentra satisfecha con su vida, proporción menor a 48.3% que había en enero de 2020, previo a la crisis sanitaria por el virus.
De acuerdo con los dominios de satisfacción relacionados con aspectos específicos, el que concentra el mayor porcentaje de población insatisfecha es la seguridad ciudadana (26.3%), mientras que 33.7% indicó estar poco satisfecha, lo que resulta en 60% de población cuya satisfacción en ese ámbito no es mayor a seis en una escala de 0 a 10. Respecto a la satisfacción con el país, 31.6% le otorga un valor entre cero y seis; 9.1% de la población se encontró insatisfecha y 22.5% poco satisfecha. En términos generales, durante el primer mes del año, en una escala de 0 a 10, la población adulta urbana calificó con un promedio de 8.2 la satisfacción actual con su vida; una décima menos que lo reportado un año antes, cuando se ubicó en 8.3.
Las mujeres reportan menor satisfacción que los hombres, pues la brecha entre ellas y ellos es de tres décimas (8.0 contra 8.3, respectivamente). En cuanto a aspectos específicos, la población adulta del país expresa el nivel más alto de satisfacción con sus relaciones personales (8.8) y el nivel más bajo en materia de seguridad ciudadana (5.5), aunque tres décimas por encima de la calificación promedio observada en enero de 2020 (5.2).
La satisfacción con el país muestra una calificación de 7.1 en promedio, dos décimas por encima de lo observado en enero de 2020 (6.9). Aunque con una discreta mejora, país y seguridad siguen siendo los dominios de la esfera pública que presentan la más baja valoración por parte de la población.
Durante enero pasado, en una escala de -10 a +10, el promedio del balance anímico de la población se ubicó en 6.1, frente a 6.5 registrado en el primer mes de 2020. La diferencia se debe a una mayor presencia de sentimientos como los que externan preocupación.
El balance anímico general resulta de restar los estados de ánimo negativos a los positivos, de acuerdo con lo expresado por los entrevistados. El porcentaje de población adulta de alto balance anímico pasó de significar 75.9% en enero de 2020 a 68.2% en el mismo mes de 2021.
El propósito del BIARE es complementar las cifras económicas, avanzando más allá del PIB, para procurar mejorar la vida de las personas a través de política públicas.
Con base en la experiencia acumulada, uno de los temas de la calidad de vida es el bienestar subjetivo, que sólo es posible captar al preguntarle directamente a las personas cómo perciben su propia situación, en relación con sus condiciones, ya sean materiales (vivienda o nivel de vida) o inmateriales (estados de ánimo, sus relaciones y logros personales), o también su percepción sobre el entorno (seguridad, vecindario, ciudad y país). La mayor parte de estos aspectos, que no tienen valor de mercado, sí lo tienen de manera subjetiva e inciden en la calidad de vida de la gente.