Cinthya teme que la separen de su hijo
De Ciudad Juárez lleva todos los días a su hijo a una escuela de El Paso, Texas.

Por: (EL UNIVERSAL) | 04/04/2019
CIUDAD JUÁREZ, Chih., abril 4 (EL UNIVERSAL).- Ante la posibilidad del cierre total de los puentes fronterizos, los padres de familia que viven en esta frontera de Chihuahua y llevan a sus hijos diariamente a escuelas en la ciudad de El Paso, Texas, consideran alternativas.
Uno de esos casos es el de Cinthya, madre de tres hijos pequeños y quien todos los días lleva al mayor, de siete años, a la escuela, utilizando el paso llamado Línea Exprés —que agiliza el paso de las personas que viven en la zona fronteriza y cruzan a diario a Estados Unidos—, consciente del riesgo de que los puentes fronterizos cierren de un momento a otro.
Ante la incertidumbre, esta madre de familia ya llegó a un acuerdo con una conocida que vive en territorio estadounidense para que, en caso de un cierre de la frontera, recoja de la escuela a su hijo Leonardo, de siete años de edad, y cuide de él en tanto se resuelve la situación. Si un eventual cierre se da cuando la familia esté en Ciudad Juárez, el niño perderá días de escuela hasta que se reabran los cruces.
Cinthya explicó a EL UNIVERSAL que la Línea Exprés le permite cruzar a Estados Unidos de una manera más rápida y, ante las largas filas de los últimos días, ella sólo ha tenido que ajustar su horario media hora. Sin embargo, reconoce que en las últimas horas el grado de estrés de quienes esperan para realizar los cruces ha ido en aumento, sobre todo de las personas que viven en la zona donde se generan las filas de vehículos y cuyo tránsito se ve entorpecido.
La madre de familia relata que ante la situación de retraso que hay en los cruces fronterizos se ha visto obligada a adaptar su rutina para asegurarse de llegar a tiempo para dejar y recoger a Leonardo en su escuela de El Paso, lo cual implica dejar a sus hijos menores, de cinco y tres años, con su papá o alguien más de la familia.
Ella espera que la situación en los puentes de esta frontera se regularice pronto, ya que sería preocupante tener a un hijo en un país, separado de sus hermanos por tiempo indefinido.
Uno de esos casos es el de Cinthya, madre de tres hijos pequeños y quien todos los días lleva al mayor, de siete años, a la escuela, utilizando el paso llamado Línea Exprés —que agiliza el paso de las personas que viven en la zona fronteriza y cruzan a diario a Estados Unidos—, consciente del riesgo de que los puentes fronterizos cierren de un momento a otro.
Ante la incertidumbre, esta madre de familia ya llegó a un acuerdo con una conocida que vive en territorio estadounidense para que, en caso de un cierre de la frontera, recoja de la escuela a su hijo Leonardo, de siete años de edad, y cuide de él en tanto se resuelve la situación. Si un eventual cierre se da cuando la familia esté en Ciudad Juárez, el niño perderá días de escuela hasta que se reabran los cruces.
Cinthya explicó a EL UNIVERSAL que la Línea Exprés le permite cruzar a Estados Unidos de una manera más rápida y, ante las largas filas de los últimos días, ella sólo ha tenido que ajustar su horario media hora. Sin embargo, reconoce que en las últimas horas el grado de estrés de quienes esperan para realizar los cruces ha ido en aumento, sobre todo de las personas que viven en la zona donde se generan las filas de vehículos y cuyo tránsito se ve entorpecido.
La madre de familia relata que ante la situación de retraso que hay en los cruces fronterizos se ha visto obligada a adaptar su rutina para asegurarse de llegar a tiempo para dejar y recoger a Leonardo en su escuela de El Paso, lo cual implica dejar a sus hijos menores, de cinco y tres años, con su papá o alguien más de la familia.
Ella espera que la situación en los puentes de esta frontera se regularice pronto, ya que sería preocupante tener a un hijo en un país, separado de sus hermanos por tiempo indefinido.